Curiosidades: Los récords menos conocidos del baloncesto
El baloncesto es un deporte lleno de momentos épicos y cifras impresionantes, pero más allá de los récords que todos conocemos, existen otros logros que han pasado desapercibidos para muchos aficionados. Estos récords, aunque menos publicitados, son igual de fascinantes y nos muestran aspectos del juego que, a menudo, no reciben la atención que merecen. A continuación, exploramos algunos de los récords menos conocidos en la historia del baloncesto.
1. Más triples en un partido por un jugador: 13
El récord de más triples anotados en un solo partido de la NBA lo ostenta Klay Thompson de los Golden State Warriors, quien consiguió un increíble total de 13 triples en un solo juego el 29 de octubre de 2018 contra los Chicago Bulls. Este impresionante logro superó el récord anterior de 12 triples, que estaba en manos de jugadores como Stephen Curry, su compañero de equipo. Lo más sorprendente de la hazaña de Thompson es que lo logró en solo 27 intentos, lo que muestra su eficiencia en el tiro desde larga distancia.
2. Mayor cantidad de triples consecutivos: 10
En un deporte donde los triples se han convertido en una parte esencial del juego moderno, Ben Gordon de los Chicago Bulls ostenta el récord de más triples consecutivos en un solo partido con un total de 10. Este récord se logró el 17 de noviembre de 2004 en un enfrentamiento contra los Seattle SuperSonics. Lo impresionante de esta marca es que, en ese entonces, los triples no eran tan comunes como hoy, y el rendimiento de Gordon fue sobresaliente incluso para los estándares actuales.
3. Más puntos anotados en un cuarto: 37
El récord de más puntos anotados en un solo cuarto de la NBA lo tiene Klay Thompson nuevamente, quien logró un impresionante total de 37 puntos en el tercer cuarto de un juego contra los Sacramento Kings el 23 de enero de 2015. Lo sorprendente de esta hazaña es que Thompson anotó estos 37 puntos en solo 12 minutos, con un rendimiento estelar que incluyó 13 de 13 en tiros de campo, 9 de 9 en triples y 2 de 2 en tiros libres. Fue una de las rachas más impresionantes en la historia del baloncesto.
4. Más tiros bloqueados en un partido: 17
El récord de más tiros bloqueados en un solo partido de la NBA es propiedad de Elmore Smith, quien, jugando para los Los Angeles Lakers el 23 de octubre de 1973, logró 17 bloqueos en un solo juego contra los Portland Trail Blazers. Este récord se mantiene firme hasta el día de hoy y es un testamento a la habilidad de Smith para dominar la zona defensiva. A pesar de la evolución del baloncesto y el enfoque en los bloqueos, este récord no ha sido superado, lo que resalta la magnitud de su logro.
5. Más asistencias en un solo juego: 30
Scott Skiles, un exjugador de los Orlando Magic, ostenta el récord de más asistencias en un solo partido de la NBA, con un total de 30 asistencias en un juego contra los Denver Nuggets el 30 de diciembre de 1990. Lo asombroso de este récord es que Skiles logró este número sin depender de jugadores superestrellas, lo que demuestra su habilidad para manejar el balón y leer el juego a la perfección. A día de hoy, este récord sigue siendo imbatido y resalta la importancia de la visión de juego en el baloncesto.
6. Mayor número de robos en un partido: 11
El récord de más robos en un solo partido de la NBA pertenece a Alonzo Mourning, quien logró un total de 11 robos jugando para los Miami Heat el 3 de noviembre de 1999 contra los Milwaukee Bucks. Este logro es una de las estadísticas más impresionantes en la historia del baloncesto defensivo, destacando la habilidad de Mourning para anticipar los pases y su destreza defensiva. Es un récord que ha perdurado a lo largo de los años y que pocos jugadores han tenido la oportunidad de acercarse.
7. Mayor diferencia de puntos en un partido de playoffs: 58
En la historia de los playoffs de la NBA, el récord de mayor diferencia de puntos en un solo partido lo tienen los Cleveland Cavaliers y los Boston Celtics. El 5 de abril de 1992, los Cavaliers ganaron por un margen asombroso de 58 puntos en un juego contra los Miami Heat, con un marcador final de 148-80. Esta humillante derrota sigue siendo la mayor diferencia de puntos registrada en un partido de playoffs de la NBA, destacando la supremacía que los Cavaliers tuvieron en esa noche histórica.
8. Mayor cantidad de minutos jugados en un partido: 69
En un partido de la NBA que fue a tiempo extra, Vernon Maxwell y Otis Thorpe jugaron un total de 69 minutos, el récord más alto en cuanto a minutos jugados en un solo partido. Este récord fue establecido en un juego entre los Houston Rockets y los Boston Celtics el 3 de diciembre de 1989. El partido pasó a tiempo extra, y los jugadores no mostraron señales de fatiga a pesar de haber jugado casi 70 minutos en la cancha. Esta marca se mantiene vigente hasta el día de hoy.
9. Mayor cantidad de rebotes ofensivos en un juego: 19
Dennis Rodman, uno de los mejores reboteadores de la historia de la NBA, logró el récord de más rebotes ofensivos en un solo juego con un total de 19 rebotes ofensivos, jugando para los Chicago Bulls en un juego contra los New Jersey Nets el 28 de abril de 1992. Rodman, conocido por su incansable trabajo en los tableros, también consiguió 21 rebotes en total en ese partido, destacando su habilidad para dominar en ambos lados de la cancha.
10. Más puntos anotados en un solo partido sin tiros de campo fallidos: 24
El récord de más puntos anotados en un solo partido sin fallar un solo tiro de campo lo tiene Wilt Chamberlain, quien logró anotar 24 puntos en un juego contra los Boston Celtics el 27 de diciembre de 1961, sin errar ningún intento de tiro de campo. Este logro es un testimonio de la eficiencia de Chamberlain en la cancha, y aunque no es un récord ampliamente conocido, sigue siendo uno de los más impresionantes en la historia del baloncesto.
El baloncesto está lleno de estadísticas fascinantes y récords impresionantes que, aunque algunos sean menos conocidos, siguen demostrando la grandeza del deporte. Estos logros menos publicitados, desde triples consecutivos hasta defensas impenetrables, son un testamento de la habilidad y dedicación de los jugadores que los han alcanzado. Cada uno de estos récords revela una faceta única del baloncesto, y nos recuerda que, más allá de los logros más conocidos, siempre hay sorpresas esperando ser descubiertas en este increíble deporte.